Fausto Benjamín Maldonado Otero. Nació en Cañamero el 3 de octubre de 1890 y murió el 10 de julio de 1935.

Cabrero, Maestro, Alcalde y Apóstol su vida estará dividida en cuatro momentos principales que marcan circunstancias personales y tareas sociales diferentes. Las dos primeras podrían englobarse en una, que sería la dedicada a los primeros años y a su formación académica, pero realmente lo destacable de esos veintiséis años es que estuvo de cabrero analfabeto diecinueve y que en siete aprendió a leer llegando a ser el número uno de su promoción en la carrera de Magisterio en Vitoria. De forma similar, los casi veinte años siguientes, primero en Almoharín de maestro alcalde y después como Director del Real Patronato de Las Hurdes, constituyen una segunda época dedicada a difundir e implantar en la región extremeña las ideas de regeneración y progreso educativo y social que con tanta rapidez había asimilado y reinterpretado a través del estudio, de sus viajes y de las amistades que supo ganarse con el tiempo.

Entre 1925 y1935 ejerce su función en Las Hurdes como Director del Patronato. Previa la convocatoria en el cuerpo de maestros en 1923 para cubrir la plazas de director, subdirectora y tres maestros más, uno para cada factoría en que se dividió el territorio, y  retrasadas casi dos años las prácticas obligadas en Madrid de los nueve seleccionados de un total de cincuenta y seis presentados, ya en junio de 1925, a propuesta de la Junta Central contra el Analfabetismo, se le nombra a Maldonado Director de la Misión Pedagógica de Las Hurdes con un sueldo de 5.000 pesetas. Allí estará cuatro años, pero en 1929 cambió a Vegas de Coria, pero ya con sus escuelas recién construidas y la residencia del director del Patronato, manteniendo las mismas responsabilidades (según la orden de 9 de julio de 1929), donde se indica que “el Maestro Director de la Misión pedagógica D. Fausto Maldonado y Otero tenga su residencia oficial y pase a continuar sus servicios a la Escuela de Vegas de Coria, cesando en la factoría de Los Ángeles, del Ayuntamiento de Caminomorisco".

En los diez años últimos de su vida la actividad desarrollada por Maldonado traspasa las fronteras de la escuela y se instala en la sociedad entera, una sociedad que no era la de la ciudad de Cáceres, Plasencia o Navalmoral ni siquiera la de los pueblos extremeños de la época, sino Las Hurdes publicitadas y piedra de escándalo en el resto de España y en otros países, sobre todo tras la visita del rey y una vez visto la película Tierra sin pan de Buñuel. Fue un maestro dedicado profesional y personalmente a la redención social y educativa de Las Hurdes, y atado voluntariamente al Real Patronato hurdano. Enterrado en la localidad hurdana de Caminomorisco.

Más información en: https://www.dip-badajoz.es/cultura/ceex/reex_digital/reex_LXXIII/2017/T.%20LXXIII%20n.%201%202017%20en.-abr/90437.pdf